Mientras Luis Ramón y Fernando Montes rescatan el cine en pantalla grande cada martes, el teatro acoge este domingo “Las Voces de Cervantes”, un espectáculo que entrelaza música, literatura y artes visuales
El Teatro San Francisco de León se consolida como un bastión de la cultura clásica y alternativa en la ciudad, ofreciendo una programación que desafía la tendencia del consumo digital. Por un lado, Luis Ramón y Fernando Montes, responsables de las exitosas sesiones de cine de los martes, han compartido su vocación por “rescatar la historia” del cine. Ambos, unidos desde la niñez por el amor al séptimo arte, vieron en el teatro la oportunidad de ofrecer una experiencia “a contracorriente”, dado que la vivencia de ir al cine “se está muriendo”.
Los responsables de la programación de cine han destacado que, a pesar de la comodidad de las plataformas de streaming, existe un público fiel y tradicional que disfruta de ver auténticas obras de arte en una pantalla grande. Reconocen que proyectar un solo título a una hora determinada a la semana condiciona la afluencia, pero se han mostrado muy satisfechos con la aceptación que el ciclo ha mantenido. Su reto principal es seguir ofreciendo buen cine, garantizando que el público pueda disfrutar de clásicos y títulos destacados en el formato que merecen, desafiando la pérdida de la experiencia colectiva y cinematográfica.
Además de su programación cinematográfica, el Teatro San Francisco se prepara para acoger este domingo a las 19:30 horas “Las Voces de Cervantes”, una “experiencia escénica única” y multidisciplinar. Este espectáculo entrelaza música, literatura, teatro y artes visuales para sumergir al público en el universo de Don Quijote. La actriz y coreógrafa Esther Acevedo da vida a fragmentos poco conocidos de la obra, mientras la directora Silvia Nogales Barrios acompaña la narración con música y el artista Joma crea dibujos en directo.
Silvia Nogales y Esther Acevedo han explicado que la idea surgió de la voluntad de explorar los textos del Quijote que tienen una clara vinculación musical, dándoles una visión diferente. El resultado es un evento interdisciplinar y muy visual donde las tres artes convergen en vivo, algo que no es habitual. Las artistas comentaron que el público entra expectante, pero a medida que el espectáculo avanza, se relaja y lo experimenta plenamente, disfrutando de una pieza que explora temas como las relaciones y el amor en la España del Siglo de Oro.
