Hablamos con Ramón Polanco, del Departamento de Empresas y Asociaciones de la FELE, y con Carlos Escanciano, presidente de la Asociación de Comerciantes del Mercado Conde Luna, para hablar sobre las obras que se están llevando a cabo
El Mercado Conde Luna, el más tradicional de la ciudad, se ha sometido a unas esperadas obras de remodelación. Todos los comerciantes y consumidores conviven con esta situación hasta el martes, pero en el primer caso al menos, lo hacen con gusto, porque reconocen que “era el momento de darle una nueva imagen, de actualizarlo. Es necesario, porque era una sensación de abandono terrible la que había”, señala el representante de la asociación.
Actualmente son 12 los comercios asentados en este mercado, de 50 que llegaron a ser en su momento. El trabajo de estos leoneses es transmitir una imagen positiva del mercado, porque “la que había no era muy buena”. Para ello cuentan con el apoyo de la FELE. Bajo el paraguas de esta federación, los comerciantes pueden hacer visibles sus demandas y reivindicaciones. “Ha sido un camino largo, pero productivo, que culmina con estas obras”, apunta el portavoz de la federación, que asegura que el mercado se ha ido modernizando y “el planteamiento es dotarle de la vida necesaria, con más puestos, más consumidores…”.
En lo que concierne al incremento de los costes, Escanciano sostiene que “el problema es que lo tienes que repercutir en el pequeño consumidor, y eso es complicado”. Una de las fortalezas de este comercio con respecto a las grandes superficie es el “producto de kilómetro cero”, pero también la “atención cercana”.
Todavía no se conocen las fechas previstas para el finalización de las obras, pero “lo importante es que todos los leoneses podamos beneficiarnos de ese mercado cómodo, de proximidad… Vamos a confiar y estaremos expectantes para que todo sea como tiene que ser, y defenderemos los derechos de la asociación”.