Es el personal más numeroso en este centro ubicado en Fresno de la Vega, y sobre el que recae la mayor parte del trabajo con los residentes
Juan Mateo Fernández, director de la Residencia Arroyo de Valdearcos en Fresno de la Vega, nos ha visitado de nuevo para hablarnos en esta ocasión del trabajo tan importante que realizan las gerocultoras o auxiliares con los residentes.
Nos explica Fernández que tenemos “que darnos cuenta que la primera persona que ve un usuario por la mañana es a las auxiliares y la última persona que ven por las noches también con ellas”. Sin duda “es el trabajo fundamental del centro, sin ellas no habría residencia, son las personas sobre las que recae casi el 100% del trabajo”.
También nos han acompañado en el estudio dos de las auxiliares de esta residencia geriátrica, Noemí García y Ana Belén Díez, quienes nos explican que ya llevan muchos años en este centro “y se sienten como en casa”.
“Tienes que hacer mucho hincapié y estar muy encima de ellos para que hagan cualquier tarea”, nos explica Ana Belén, “también para fomentar su autonomía y que hagan por si mismo aquellas cosas que pueden hacer y que no se dejen del todo, pero es normal tener que estar detrás de ellos”.
En cuanto al protocolo diario que realizan con ellos, Noemí García nos señala que “tenemos un calendario de duchas, por días y personas, para las personas dependientes, los que son válidos lo hacen ellos pero aún así les supervisamos para que no se escaqueen del aseo diario porque la higiene en las personas mayores es primordial porque dejan de darle importancia a cosas básicas, como hidratarse la piel todos los días”.
Por último, nos comentan tanto Noemí como Ana Belén “muchas veces es un trabajo poco valorado, pero es un trabajo vocacional que te tiene que gustar, y te tiene que gustar ayudar mucha a las personas que lo necesitan como las personas mayores, sobre todo cuando son tan dependientes y necesitan también mucho cariño, es un trabajo que al final de la jornada nos resulta muy gratificante”.
