Nos visita Irene Velado, coordinadora de la Fundación Secretariado Gitano, para hablarnos de la labor que hacen, los programas que tienen y del Hogar de la Esperanza️.
La pasada semana se llevó a cabo un intercambio en el Hogar de la Esperanza. “Este centro infantil lo empezamos a gestionar hace unos meses, aunque tiene años de trayectoria. Lo gestionaba otra entidad y tuvo problemas con su continuidad. Nos hicimos cargo del proyecto, se ha respetado pero también se ha dado un nuevo impulso”. Desde la Fundación SM se propuso una colaboración, que consistía en que un grupo de trabajadores y alumnos colaboraran en el análisis de este centro e iniciar reformas, cambios de programación…”.
Pero, ¿Cuál es la finalidad de este centro? El objetivo es que la población tenga unos niveles adecuados a lo que se necesita. Acoge a los niños más vulnerables y cuenta con servicio de comedor, de autobús… Se trabaja para que las familias que no tienen recursos tengan esos servicios acordes a lo que necesita la población”.
La Fundación Secretariado Gitano, desde sus inicios, trabaja por la promoción del pueblo gitano. “Tenemos que conseguir que la población y el pueblo gitano participe de todos los derechos y deberes”. Tiene un proyecto de formación de empleo, “tratando de fomentar en los gitanos el trabajo por cuenta ajena”.
El hermetismo del pueblo gitano y los prejuicios que existen sobre él influyen, por lo que “la fundación, en 2008, se puso en marcha un proyecto para que los niños terminen la ESO. La educación es el camino para la integración”, sentencia Velado, insistiendo en que “el cambio viene, en buena parte, de la propia comunidad. Además, el esfuerzo de la mujer gitana es importante. Ellas son las responsables de la familia, pero también las que más dificultades tienen. Es cierto que se han producido cambios importantes. En la propia entidad, la presidenta es una mujer…”.
Velado señala que “para la comunidad gitana es difícil porque no cuenta con referentes. Cuando en tu entorno no los tienes es más difícil. Por eso intentamos mostrar esos referentes, que se conozcan. Todos los que son invisibles son a los que tenemos que da voz”.
Sigue habiendo “racismo” con el pueblo gitano. “Es la población más discriminada y seguimos trabajando en ello. Es un trabajo de todos. Nosotros tenemos un servicio de atención a personas que sufren discriminación, pero lo tienen tan interiorizado que cuesta cambiarlo”.
La representante de la fundación asegura que los problemas más importantes en León son de vivienda.
“Los gitanos avanzan y quieren seguir avanzando, pero es verdad que el esfuerzo es el doble”, apostilla, agregando que “la pandemia ha traído algo bueno, con muchas medidas para no quedarse atrás, y el pueblo gitano no puede quedarse atrás, tiene que tener esa formación, esos recursos… Es una oportunidad para que se puedan poner al día de lo que se está moviendo”.
El último estudio realizado, allá por el 2015, estima unos 3.500 gitanos en la provincia de León.
