En 2005 científicos de EEUU descubrieron colágeno y vasos sanguíneos en restos óseos de un Tiranosaurio Rex
Antonio Martínez visita de nuevo nuestro estudio para responder algunas de las dudas que le plantean nuestros oyentes respecto a la teoría del Diseño Inteligente.
Uno de las preguntas formuladas ha sido si no podría ser inteligencia haber usado la evolución para producir los diferentes seres, a lo que el doctor responde que “podría pero no hay ningún mecanismo conocido que pueda explicar el cambio de especie”.
Para explicar, por ejemplo, que los hombres supuestamente vienen de los monos, “se habla de mutaciones que hicieron que se generase una especie diferente, pero es que las mutaciones sólo generan o nada, en el mejor de los casos, o enfermedad o muerte”. detalla Antonio Martínez y continúa añadiendo que “no se conocen mutaciones positivas que produzcan un órgano, una función o un ser mejorado, eso es una entelequia”.
Respecto a este tema añade además que “sabemos que hay especies que se han extinguido no sabemos de nuevas especies, no hay ninguna prueba de que haya habido ninguna evolución”.
Por otro lado, otra persona planteaba la cuestión de si ese ser supremo creó primero a los dinosaurios y después al hombre, ya que los primeros se extinguieron. En cuanto a esta pregunta, Antonio Martínez es claro al afirma que la teoría del Diseño Inteligente “no se mete en esas cuestiones, es una teoría biológica y no entra en si fueron antes unos u otros “.
En cuanto al tema de los dinosaurios, el doctor en Medicina y oftalmólogo nos explica que “lo que se nos dice es que hace 65 millones de años desaparecieron los dinosaurios por un meteorito que cayó en Yucatán y sobrevivieron las especies más pequeñas, pero esto es una teoría y la gente lo percibe como un hecho”.
Por último, Antonio Martínez añade que “lo que no sabe la gente es que en el año 2005 en un hueso fosilizado del Tiranosaurio Rex aparecieron restos de vida orgánica, restos de colágeno y restos de vasos sanguíneos, lo que quiere decir que esos huesos no pueden tener 65 millones años porque no se sabe el tiempo que puede sobrevivir una proteína sin descomponerse pero desde luego no un millón de años”.
