Rosa Luz Arias, asesora fiscal de la Asesoría Joaquín Charro, nos cuenta todas las novedades de la Campaña de la Renta 2022.

No hay muchas novedades con respecto al año anterior, “lo que quiero dejar claro es que las prisas no son buenas para nada. Las informaciones de los borradores a veces no están completas. La información de Hacienda sobre los contribuyentes deriva de las declaraciones de las empresas, y no están siempre a principios de curso… Por eso recomiendo que la gente no se precipite. Además, lo que te devuelve Hacienda es lo que te ha retenido, por lo que por esperar unos días más no pasa nada. El plazo es bastante amplio”.

Además, la profesional sostiene que “en el caso de que la declaración sea individual, ya no hay posibilidad de hacerlo de forma conjunta, y muchas veces puede beneficiar”.

En lo que respecta a los cambios, destacar un impuesto nuevo a las grandes fortunas. “Será en el mes de julio y no sabemos cómo va a ser hoy por hoy. Tendrá algo de interacción con el de Patrimonio, y hasta aquí se puede leer”.

Otra novedad es la ampliación de la maternidad. “Hasta ahora, la deducción solo correspondía a las madres que estuvieran de baja por maternidad, pero activas. Ahora se ha extendido de forma retroactiva. Esas mujeres que hayan cotizado o estén de baja por un ERE o en desempleo, que no tenían derecho, ahora sí van a tenerlo”. Eso sí, Arias sostiene que “no será tan sencillo y estas personas necesitarán un profesional que les pueda guiar”.

La asesora también alude a la deflactación del IRPF, “que en el caso de Castilla y León nos perjudica. El IRPF es un impuesto que se paga en función de las ganancias que tengan las personas físicas. Con motivo de la inflación, en muchas comunidades las tarifas se deflactan, pero en Castilla y León no están deflactadas, así que habrá una pérdida de poder adquisitivo”. En Castilla y León tampoco hay deducciones por material escolar, libros o alquileres, al contrario que en otras comunidades. Por el contrario, en Castilla y León “tenemos las deducciones por familias numerosas, por adopción, cuidado de hijos menores, inversión en rehabilitación de viviendas destinadas a alquiler en núcleos rurales, por fomento al emprendimiento, que será en un mundo ideal, en construcción de viviendas en el medio rural, y por donaciones en fundaciones de la comunidad para el Patrimonio Histórico y Cultural… No hay mucha gente que se pueda incluir en estos apartados”.

Por otra parte, están las ayudas del Gobierno, como es el bono cultural de 400 euros para los jóvenes, o la ayuda de 200 euros para personas con la renta mínima y escaso patrimonio. “El año pasado ya fue la novedad que las personas con el ingreso mínimo vital tenían que hacer la declaración. Es una forma de censar. No es que fueran a pagar, pero sí declarar. Ahora, con esta ayuda hay que declararla como ganancia patrimonial, que tiene una casilla habilitada para ello”. También hay una casilla para el tema de las criptomonedas.