Sylvia Vilas, portavoz del colectivo para la recuperación servicio de cirugía equina del Hospital Veterinario Universitario de León, nos pone al día de la situación en la que se encuentra esta reivindicación
El Hospital Veterinario Universitario de León es toda una “referencia” del noroeste del país, y en buena medida se debe al servicio de cirugía equina. “Llegaban caballos de toda España y pretenden seguir viniendo, pero ahora mismo no se están haciendo cirugías desde julio, no desde octubre”. La alternativa pasa por trasladar al animal, ” y que sobreviva”, a Madrid, señala la portavoz del colectivo, que denuncia que “hasta ahora el Hospital sí permitía que otros veterinarios, alquilando las instalaciones, pudieran practicar cirugías, pero ya no. Tenemos constancia de profesionales que han pedido operar y les han dicho que no se presta ese servicio. No entendemos por qué a una solicitud para corregir un déficit se nos contesta con una mentira”.
Esto conlleva un peligro para los caballos, pero también es un varapalo para los alumnos de esta disciplina, porque “si no hay este tipo de cirugías, no las van a ver nunca”.
Hace unos días, el colectivo enviaba más de 700 firmas de afectados por la falta de este servicio, aunque “nos consta que quedan muchas por llegar. No somos 10 afectados, somos mucha gente”. Algunos de ellos, tanto veterinarios como propietarios de caballos, han hecho públicas sus experiencias personales y las han hecho llegar a Manos Arriba FM.
La Universidad asegura que “el servicio de clínica equina no ha cerrado y funciona con normalidad los 365 días del año, con dos especialistas y dos residentes”, pero para Vila es una “cuestión matemática, si trabaja ese personal los 365 días del año a lo mejor lo que hay que enviar es una inspección de trabajo. Por otro lado, no es cierto que haya veterinarios que hagan este tipo de cirugías. Sí se hacen castraciones o intervenciones menores, pero si hay un cólico, una cesárea, no hay nadie que la haga”.
Desde el colectivo, aseguran que “estamos dispuestos a hablar con quien haga falta” para revertir la situación. Porque “no podemos tener esa carencia cuando tenemos los medios y profesionales necesarios para suplirla”.
