Nos visita Alberto del Pozo, portavoz de la Plataforma por una Sanidad Pública en León, para tratar la situación sanitaria en la ciudad y provincia.

Hace unos días, la plataforma se concentraba en el Hospital para recoger las inquietudes y necesidades de la gente, pero también para “concienciar a las personas de que deben exigir la participación social y comunitaria en el Sistema Sanitario”, señaló el representante de este organismo, afirmando así que “la legislación sanitaria contempla esta participación. Hay órganos definidos legalmente, pero no se utilizan, entonces, las propias administraciones, que obedecen a criterios economicistas, fríos y a veces distantes, no se da cuenta de que la población puede ser un aliado, una vez que conoce la situación”.

“Se ha puesto en evidencia que nuestro Sistema Sanitario, que era envidiable antes de la crisis económica de 2008, con la pandemia se vio empequeñecido, pero las administraciones no han aprendido gran cosa”, sostiene Del Pozo. “Lo que ocurre es que queremos poner soluciones a corto plazo, basando todas ellas en la carencia de médicos. Eso es una evidencia relativa, porque nos loo hemos ido ganando a pulso expulsando a los profesionales, y porque esto depende también de otras categorías a las que no se están recurriendo”.

Los principales problemas con los que se encuentra León es la Atención Primaria. En Atención Especializada hay “listas tremendas, seguramente intolerables”, pero en “Atención Primaria se están cerrando consultorios y están trabajando bajo mínimos porque hay carencia de personal”.

Este profesional sanitario reconoce que “hay que tener valentía para hacer entender a la población que no porque no tenga el médico tan a mano está más desatendido, sino que lo que debería es tener un transporte adecuado… Para esto hace falta inversión. No se pueden hacer promesas políticas cuando no se dispone de dinero para ello”.

En una provincia como León “se emplea mucho tiempo en desplazamientos, y eso hace casi imposible a un profesional llegar a todo”. Del Pozo reclama un “nuevo modelo en el que se ofrezca una atención mixta asistencial, pero también educación para la salud, participación en la comunidad, prevención y promoción. Todo eso se consigue cuando las plantillas las edificas no solo con médicos o enfermeros, sino con auxiliares, trabajadores sociales, fisios…

Cuanto peor esté la sanidad pública, “mejor estará la privada, y esto no puede pasar, no puede vivir a costa de empeorar la sanidad pública”.

El profesional asegura que “los ciudadanos tienen que conocer que hay unos órganos en cada centro de salud, que les permite opinar y enviar quejas. Claro, son órganos molestos para las administraciones”.