Rodrigo Valle, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Villaquilambre, nos habla del Polideportivo de Navatejera, que reabre sus puertas con numerosas propuestas para los vecinos.

Estas instalaciones “estaban abocadas al cierre y nos hemos puesto como objetivo municipalizarlas y darles una segunda vida, que ya la tiene”. El trabajo “no ha sido fácil, pero una vez que se han limado asperezas, la gestión ha pasado a ser municipal”.

El concejal no entiende que la política se inmiscuya e impida sacar adelante temas como el del polideportivo, pero de este tipo de situaciones “se aprende a vivir con el ‘mal’. Considero que hay muchos políticos que no saben lo que es trabajar, y todos deberían saber lo que es ‘hacer la calle’. Cometen el error de dar lecciones, pero las lecciones se dan desde abajo”, sentencia.

El Polideportivo de Navatejera “ofrece de todo a precios muy competitivos”. Por ejemplo, una familia completa puede hacer uso de todas las instalaciones y actividades por 45 euros al mes. Una persona individual igual, por 30 puede disfrutar de la piscina, de las pistas de squash, pádel y frontón, del gimnasio… y de las clases de zumba, de step, de pilates…

Destacar que se han recuperado todos los puestos de trabajo que se habían paralizado durante estos 15 meses. Son 16 trabajadores que vuelven a su labor para proporcionar el mejor servicio en este espacio deportivo. Es el caso de Susana González y Marina González, que aseguran que “esta situación que se ha vivido nos ha traído consecuencias físicas y psicológicas”. Advierten una “sensación de tristeza al ver que cada vez entraba menos gente a la instalación, cómo iba en declive”. No pensaban que se iba a cerrar la instalación, “y menos por antojo político. Nos vendían lo que no era. La realidad es que dábamos cinco pasos adelante, al día siguiente 10 para atrás. Era una desesperación continua. Lo bueno es que contábamos con el apoyo de Rodrigo. No nos olvidamos de los que han estado a nuestro lado”.