¿Compramos la legumbre que queremos comprar? No mirar el etiquetado te puede engañar

Es diferente el lugar de envasado del lugar de producción. Un consumidor puede comprar legumbres envasadas en León, pensando que son de León cuando en realidad han sido producidas en otra provincia o incluso fuera de España. El presidente de UCALE-COAG en León, Apolinar Castellanos, explicó en Manos Arriba que “hasta hace poco sí había engaño”. No obstante, con la marca de Indicación Geográfica (IGP) el consumidor ya puede estar seguro de la procedencia de la legumbre que compra. Sólo el 30% de la legumbre que se vende tiene IGP.

Apolinar Castellanos explicó que España es deficitaria en producción de legumbres. Consumimos más de lo que producimos. Por ello, es necesario importar. Los principales competidores de las legumbres leonesas están en la Comunidad Autónoma de Castilla y León, aunque en las estanterías de los supermercados podemos encontrar legumbres envasadas aquí pero cuya procedencia puede ser de Argentina, Uruguay, Brasil o incluso Canadá. “Lo que viene de fuera es de peor calidad”, denunció Castellanos, con unos costes de envasado más baratos. “Hoy por hoy, el consumidor no valora el esfuerzo del productor”, añadió.

El bajo coste de la legumbre importada viene dado por el propio sistema de producción. En esos países suele plantarse legumbre de secano, a nivel industrial y en grandes superficies, mientras que “aquí son pequeñas explotaciones” que apuestan más por la calidad del producto.

Apolinar Castellanos recalcó que hay que fijarse en la etiqueta del producto, que debe reflejar el país de procedencia del mismo. “Hay que mirar que haya sido producido en León o en Castilla y León, que se haya producido en nuesta tierra”, defendió el representante del sindicato agrario.