En ‘Manos Arriba’ hablamos con varios docentes y representantes de algunos centros educativos leoneses sobre las dificultades que se han planteado este año de pandemia y sobre la EBAU

José Antonio Crespo, director del Sánchez Albornoz, Manuel González, profesor y vocal de Centro sobre la EBAU y Ana Alonso, coordinadora de la EBAU en Divina Pastora, coinciden en que el curso ha terminado “felizmente, con una normalidad y satisfacción”. Los centros han respondido, “no pensábamos que el curso iba a salir así, pero hemos podido dar todo el curso sin contagios en las aulas, los protocolos se han mantenido y los alumnos lo han hecho muy bien”.

En lo que respecta a la prueba de acceso a la universidad, este año se presentan 2.000 alumnos entre León y Ponferrada, un 10% menos que el curso anterior. Los docentes relatan que está funcionando bien, los protocolos están funcionando y la reacción de los organizadores está siendo “magnífica”. Reconocen que la situación y los protocolos establecidos han afectado, pero “hemos podido plantear el curso en buenas condiciones, pudiendo impartir las clases sin problemas. Los alumnos van igual de preparados que en otros cursos”, insisten. Aseguran que el porcentaje de aprobados es alto, así como el rendimiento.

Los representantes educativos aclaran que la antigua prueba de selectividad y la EBAU se diferencian en la dificultad, siendo esta última la que más nivel de competencia exige. Pero en los centros, además de formar académicamente, también se establecen pautas para tranquilizar a los alumnos y que puedan afrontar la prueba de la mejor manera posible.

En lo que respecta a las asignaturas, según los profesionales cada uno tiene su “bestia negra. Unos las matemáticas, otros el inglés…”.

El otro problema que existe es la diferencia de la prueba en las diferentes Comunidades Autónomas. 17 comunidades, 17 pruebas, y este es el sistema. “Lo más justo sería unificar esta prueba, que todos tuvieran los mismos contenidos y condiciones. Es injusto, pero mientras sigan siendo una realidad las competencias de la comunidad los exámenes son distintos”, advierten. Creen que en Castilla y León se están haciendo las cosas “bien y se ha hecho un esfuerzo, pero sin caer en el regalo”.