La psicóloga Marta Herreras habla a los oyentes de ‘Manos Arriba’ sobre la fatiga pandémica y la necesidad de adaptación y aceptación ante las situaciones derivadas de la crisis sanitaria

Más de 365 días hablando de coronavirus. Casi un año desde la declaración del estado de alarma… Tuvimos que aprender muchas cosas: A no salir de casa, a no ver a nuestros seres queridos… Todo ello ha hecho aflorar mucha depresión, cansancio y ansiedad entre la población. A esto se le ha denominado fatiga pandémica, y la psicóloga Marta Herreras explica a los oyentes de ‘Manos Arriba’cómo la Covid-19 “nos ha puesto sobre la mesa la obligación de adaptarnos a una nueva situación. A afrontar cambios a muchos niveles. El primero de estos cambios, el sanitario. Surge el miedo a enfermar… También surge el miedo laboral, no solo el desempleo, sino la adaptación a otras fórmulas como el teletrabajo. También “nos hemos tenido que adaptar a nivel social y económico”, asegura esta profesional de la Psicología, que asegura que se trata de un “cambio brutal” que se ha llevado a cabo de forma muy rápida, lo que ha conllevado una serie de “secuelas”.

Herreras habla de un “estrés sostenido y mantenido en el tiempo”, que va “minando” a todas las personas, porque “hace que tengamos que emplear una dosis de energía y recursos a diario, para afrontar la situación, y todo eso provoca un desgaste”. Para la psicóloga, se puede hablar de dos circunstancias. La primera, la de aquellas personas que por situaciones ya “venían tocados, y esto ha sido la puntilla”. Para otros, esto ha supuesto una adaptación en la que “hemos tenido que aprender a valorar cuáles son nuestros recursos adaptativos, e incluso sacar de ello cosas positivas”. Porque para Herreras, la capacidad de adaptación, la resiliencia, hace que “ante la adversidad podamos salir mejores”.

La psicóloga también deja claro que la pandemia no ha azotado de la misma manera a todos. Los factores personales y externos influyen, y mucho. “Hay situaciones que aplastan. Son los daños colaterales de la Covid”.

Herreras agrega que los psicólogos inciden mucho en las relaciones sociales y el deporte, pero llegó el 15 de marzo y todo se derrumbó. Por eso, se han buscado vías alternativas “y muchos estamos descubriendo cosas que de no ser así no se descubrirían, como por ejemplo el uso de las nuevas tecnologías en según qué colectivos o personas que no pensaban que podían utilizarlas como lo han hecho, o la cocina… Hay quienes han descubierto nuevos gustos, capacidades e intereses”.

La profesional añade que las consultas psicológicas se han incrementado en gran medida durante estos meses, y en todos los ámbitos. “La pandemia nos deja situaciones difíciles de gestionar, y cuando la ansiedad ataca, es un mal compañero de viaje”. Herreras asegura que acudir a un especialista de la salud mental cuando estamos bloqueados “es sano, y a veces se necesita saber lo que es una crisis de ansiedad, cómo tratarla…”.