El nutricionista de cabecera de ‘Manos Arriba’, Emilio Blanco, nos habla de este concepto, aplicado a la cocina para toda la semana

Para el experto en nutrición, esta opción es un acierto, porque se evitan los ultraprocesados. Añade que “siempre nos excusamos en la falta de tiempo para hacer la compra o la comida”, pero con una buena planificación, asegura, sería bueno y muy práctico. “Tiene muchas ventajas”, pero insiste en la planificación.

Blanco cree que el inconveniente puede estar en tener o no las herramientas adecuadas para la conservación de los alimentos y también para cocinarlos.

Dentro de esos platos que se pueden preparar, no pueden faltar las verduras, la carne ni el pescado, incluso los huevos, si es posible. El menú de Blanco para toda la semana incluye cinco raciones de verduras, dos de huevos, dos de legumbres, tres de pescado y dos de carne.

“La cesta de la compra es muy importante, pero también el trato que le demos a los alimentos, es algo fundamental”, insiste. El nutricionista asegura que si se cocinan bien, no tienen por qué perder su sabor original, incluso hay cosas que reposadas saben mejor, agrega.

También hay que tener en cuenta que la ingesta continua de los mismos alimentos puede saturar, y en consecuencia “podríamos cansarnos y no los consumiríamos”, por lo que, una vez más, enfatiza en la planificación.

Para la conservación, Blanco prefiere los recipientes de cristal, aunque “si el plástico es bueno, con las propiedades adecuadas (marca de la CE y apto para contener alimentos), también vale”.

Aula de nutrición: El brócoli

Es un alimento con una gran bibliografía de propiedades nutricionales. Aporta unas 34 calorías por 100 gramos. Lo que se ingiere son las flores. Precauciones: Las lactantes “no deberían” -si es crudo- comer brócoli, igual que las personas con tiroides. Todo esto, sin embargo, se soluciona con la cocción. Aguanta bastante sin deteriorarse.